Música como valor añadido

Si ya lo decía el mismísimo Michel Chion en su libro La Audiovisión: la Música es un «valor añadido». ¿Qué significa esto? pues muy sencillo, quiere decir que cualquier imagen que se acompañe de música se enriquece, y adquiere una serie de matices que, únicamente con lo que vemos, no seríamos capaces de percibir. Esto implica dos cosas inmediatas (resumiéndolo mucho), y, como siempre, te las voy a contar con sus ejemplitos correspondientes:

1. Cualquier secuencia de imágenes que pretenda tener cierto ritmo, mejora sustancialmente si se le añade la música adecuada. Para que lo veas, te dejo dos clips de la cabecera de Friends. En el primer ejemplo, lo verás tal cual salía en la serie; pero en el segundo se ha suprimido la música y se ha dejado el sonido ambiente de la grabación. ¿A que da de todo menos buen rollito y energía? XD

 

 

 

2. La imagen, que de por sí es polisémica, adquiere un significado concreto en función de la música que lleve. Mira estos dos ejemplos de los títulos de crédito iniciales de El Resplandor (S. Kubrick, 1980). En el primer clip, dejamos la música original, que es una versión del Dies Irae que no anticipa nada bueno… en cambio, alguien que no hubiera visto la peli y viera el comienzo con la música del segundo clip, pensaría que se trata de la típica comedia de universitarios americanos que se van de vacaciones en coche a desbarrar a tope. Y nada más lejos de la realidad…

 

 

 

Bueno, pues visto lo visto… yo creo que queda más que demostrado que todo mejora si se le pone la música adecuada, ¿no? 😉